ROMA - Los líderes han expresado un “amplio apoyo” a un acuerdo histórico para establecer un impuesto corporativo mínimo global del 15% que tiene como medida lograr un sistema tributario más justo y evitar que las empresas se beneficien de regímenes fiscales complacientes y no paguen impuestos en los países en los que operan.
Los líderes hablaron sobre la propuesta durante la sesión de apertura el sábado de la cumbre, dijeron funcionarios del país anfitrión, Italia.
Tras la aprobación formal que se reflejará en la declaración de cierre del domingo, los países promulgarían el impuesto mínimo por su cuenta. La idea es que los países de la sede aumentarían el impuesto de una empresa al 15% si las ganancias de la empresa se redujeran a otro país.
En la economía digital y global actual, las ganancias pueden provenir de intangibles como derechos de autor y marcas comerciales, y por lo tanto pueden transferirse fácilmente a países que ofrecen impuestos casi nulos con la esperanza de atraer ingresos que de otro modo no tendrían.
Uno de los más entusiastas fue el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, quien celebró el acuerdo y aseguró que así la comunidad internacional "ayudará a las personas haciendo que las empresas contribuyan pagando su cuota" de impuestos.
CÓMO FUNCIONARÍA
El mecanismo, que se adoptará para 2030, sigue el camino ya trazado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) de un sistema sustentado en dos pilares.
El primero fija que el volumen del beneficio residual de las empresas, es decir, el restante después de que el país donde esté la sede se haya quedado con el impuesto correspondiente al 10 % de la rentabilidad, se repartirá entre los países donde operan.
El segundo establece un tipo mínimo de sociedades del 15 % para las que tengan una facturación de al menos $866 millones.
El pasado 8 de octubre, la OCDE informó de que 136 países y jurisdicciones, que abarcan más de 90 % del PIB mundial sobre los 140 que participan en las negociaciones, acordaron que para el primer pilar la cifra sea del 25 % de ese beneficio residual, después de que hasta ahora se estuviera discutiendo entre un rango entre el 20 y el 30 %.
Esto se refiere a grandes empresas con una facturación mundial superior a $23,000 millones y una rentabilidad superior al 10 %, y el reparto de beneficios se haría entre los países donde cada compañía tiene ingresos superiores a $1.15 millón $288,000 en pequeños estados).
Una pregunta clave es si el Congreso de EEUU aprobará leyes para cumplir, ya que EEUU alberga a 28% de las 2,000 multinacionales más grandes del mundo.
SESIÓN G20 SE REALIZA EN ITALIA
La cumbre comenzó este sábado con una sesión dedicada a economía y sanidad a nivel global, y concluirá el domingo con una rueda de prensa del primer ministro italiano, Mario Draghi, que resumirá los acuerdos alcanzados en cuestiones como fiscalidad, pandemia, recuperación económica y cambio climático.
A la cumbre asisten el presidente de Estados Unidos, Joe Biden; el de Francia, Emmanuel Macron; el de Argentina, Alberto Fernández, y el de Brasil, Jair Bolsonaro, entre otros jefes de Estado, así como el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, como invitado permanente.