Totalmente destrozada. Así se encuentra la familia del bebé de un año que murió tras ser atacado salvajemente por un perro en East Hartford, Connecticut.
El menor habría sido mordido mortalmente por el canino que era la mascota de la familia, mientras jugaba en el patio de su casa junto a su mamá.
Los familiares aún están asombrados, pero ella tuvo el valor de narrar esos momentos de terror que vivió ayer en el trampolín del patio de su casa.
“Estábamos en el trampolín brincando y el perro brincó al trampolín y agarró al bebé y lo tiró en el piso”, dijo Keyshla Torres, visiblemente afectada, por la pérdida del pequeño Lennox.
“No me pude aguantar, no puedo hacer nada, no pude aguantar a mi bebé”, lamentaba Ricky Rohena, padre del niño que apenas había cumplido 1 año el pasado sábado.
La policía de East Hartford señaló hoy que dos perros que estaban en el hogar ahora están bajo los cuidados de la unidad de control de animales en una perrera local.
Aún es incierto lo que sucederá con esas mascotas. La policía de East Hartford hoy dijo que no se anticipa que se presenten cargos ante esta tragedia que enluta a esta familia.