Un gran sistema de tormentas se dirigía el sábado al noreste de Estados Unidos, amenazando con generar fuertes nevadas e inundaciones costeras después de que fuertes vientos y posibles tornados dañaron viviendas y edificios, dejaron a miles de personas sin electricidad y derivaron en la muerte de 11 personas en una amplia franja del sur y la región centro-norte del país.
Tres personas murieron por la caída de árboles en Alabama en medio de intensas tormentas en el estado.
En Mississippi, una mujer murió dentro de su camioneta después de que una rama podrida de un árbol golpeara su vehículo, y en Arkansas un hombre se ahogó después de conducir su vehículo a una crecida.
Sitios noticiosos reportaron que dos personas fallecieron en Tennessee cuando les cayeron árboles encima.
PRONOSTICAN FUERTES NEVADAS E INUNDACIONES EN EL NORESTE
El viernes se registraron tres muertes relacionadas con las condiciones meteorológicas en Kentucky. Los fallecimientos ocurrieron en tres condados distintos a medida que las tormentas con vientos en línea recta atravesaban el estado.
El gobernador Andy Beshear había declarado un estado de emergencia antes de la tormenta y el viernes en la noche el alcalde de Lousville, Craig Greenberg, hizo lo propio debido a las severas tormentas, ventarrones, amplios daños y el peligro para las personas y la propiedad.
“Aliento a todos en nuestra comunidad a que ejerzan precaución exterma esta noche, y en los próximos días. No manejen donde vean agua, no se acerquen a líneas eléctricas caídas, ni hagan nada que ponga en peligro la vida de otras personas”; dijo Greenberg en Facebook.
El Servicio Meteorológico Nacional en Lousville dsecribió la tormenta el viernes como “poderosa e histórica” con rachas máximas de viento de entre 0 y 80 mph.
Más de 1 millón de clientes en Kentucky, Tennessee y Michigan estaban sin electricidad el viernes por la noche, según poweroutage.us.
La tormenta avanzó el viernes por la tarde sobre el área de Detroit, cubriendo rápidamente calles y carreteras bajo una capa de nieve. El servicio meteorológico indicó que en algunas áreas podría haber condiciones de ventisca con una caída de nieve de 3 pulgadas por hora.
DTE Energy, con sede en Detroit, informó que más de 130,000 clientes se quedaron sin electricidad el viernes por la noche. Fue la última bofetada después de que las tormentas de hielo de la semana pasada dejaran sin luz eléctrica a más de 600,000 hogares y empresas.
En Oklahoma cayó granizo y se registraron fuertes vientos.
El sistema de tormentas se dirigía hacia Nueva Inglaterra, donde se preveía una mezcla de nieve, aguanieve y lluvia en toda la región a partir del viernes por la noche y hasta el sábado, lo que llevó al Servicio Meteorológico Nacional a emitir una advertencia de tormenta invernal.
Existe la posibilidad de inundaciones costeras en Massachusetts y Rhode Island, y la tormenta podría traer hasta 18 pulgadas de nieve a partes de Nueva Hampshire y Maine. También traerá fuertes vientos con rachas de 40 a 50 millas por hora, lo que podría causar cortes de energía.
Las autoridades aeroportuarias de Portland, Maine, cancelaron varios vuelos para el sábado previo al mal clima, y algunas bibliotecas y comercios de la región anunciaron cierres durante el fin de semana.
Aun así, la mayoría de los habitantes de Nueva Inglaterra se tomaron la tormenta con calma, ya que se prevé que el fin de semana vuelva a haber un clima más cálido.
No ocurrió lo mismo en California, donde el sistema meteorológico azotó el estado esta semana con 10 pies de nieve.
Es probable que algunos residentes de las montañas al este de Los Ángeles permanezcan atrapados en sus casas al menos una semana más, después de que la nevada resultara excesiva para la mayoría de las máquinas quitanieves.