SANTA FE - Tras su aprobación el 23 de marzo, Nuevo México ahora está en camino para construir cruces de vida silvestre, en un intento de proteger la fauna y biodiversidad del estado y disminuir el número de accidentes de tránsito que involucran animales en las carreteras nuevomexicanas.
El programa piloto, Wildlife Crossings, asignará $350 millones durante los próximos cinco años, para la construcción de estos cruces naturales, elevados y subterráneos y para que se hagan investigaciones sobre cómo mantener en movimiento la vida silvestre y cómo hacer que las carreteras del estado sean más seguras.
“El programa piloto de Wildlife Crossings, permitirá que las comunidades indígenas, las agencias federales, estatales y locales, tomen medidas proactivas para mejorar la conectividad del hábitat para que la vida silvestre pueda sobrevivir y prosperar frente a un clima cambiante y un desarrollo creciente", aseguró Jeremy Romero, coordinador regional de conectividad de la Federación Nacional de Vida Silvestre.
En una visita a Santa Ana pueblo el martes, el secretario de Transporte de EEUU, Pete Buttigieg, presentó más detalles sobre el programa. Los administradores de vida silvestre de la tribu de Nuevo México han estado rastreando pumas, alces y otros animales a lo largo de decenas de miles de acres en el centro-norte de Nuevo México y han documentado víctimas a lo largo de carreteras transitadas que atraviesan los límites tribales.
Allí, Buttigieg visitó una de las alcantarillas debajo de la Interestatal 25 cerca del pueblo, que sirve como vía migratoria para los animales que viajan entre las altas cadenas montañosas del desierto que bordean las tierras tribales y los bosques de álamos y sauces a lo largo del Río Grande.
El secretario lo llamó un gran ejemplo, diciendo que la solución de seguridad necesaria en un lugar, como un paso de peatones ocupado en medio de un área metropolitana densa, es diferente de lo que se necesita en un área donde hay tantos puntos de conflicto entre el tráfico y la vida silvestre.
“Ya sea que esté hablando de los efectos más amplios sobre el clima que vienen con lo que hacemos o no hacemos en todo, desde las alternativas de tránsito hasta el diseño mismo de nuestras carreteras, todo lo que está en juego en una buena política de transporte”, argumentó el secretario de transporte, agregando que no todas las respuestas deben provenir de Washington, solo una mayor parte de los fondos.
Según explicaron funcionarios federales, a nivel nacional, alrededor de 200 personas mueren cada año en colisiones que involucran vida silvestre y vehículos. Mientras que, según Buttigieg, en Nuevo México, hay un promedio de alrededor de 900 accidentes por año que involucran a la vida silvestre.
“Con más de un millón de colisiones de vehículos con vida silvestre que ocurren cada año y cuestan más de $8,000 millones en daños, el programa reducirá las colisiones de vehículos con vida silvestre y aumentará la seguridad de los automovilistas. Esperamos que este programa fomente esfuerzos de colaboración adicionales con las Naciones Tribales para el manejo de la vida silvestre entre jurisdicciones”, aseguró Romero.